ARTE, CIENCIA y TECNOLOGIA.
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jueves, 10 de febrero de 2011

BsAs SimCity


Es interesante ver como algunos juegos influencian nuestra realidad, por ejemplo en Spillway veo un notable análisis sobre las tensiones contradictorias que subyacen dentro del juego Simcity, y también como ejemplo se muestra el mapa dimensional de la ciudad de Shanghai, del motor de búsqueda chino Baidú, donde se ve absolutamente clara la influencia de este juego.
Ahora bien ¿es posible implementar la teoría de juegos en la planificación de la ciudad? Por el momento con Simcity, uno puede jugar diseñando ciudades ficticias que pueden comenzar como simples pueblos y ganar complejidad a medida que avanzan, para finalmente terminar convirtiéndose en enormes ciudades virtuales. Sin embargo ¿se podría poner de base el plano de una ciudad existente? ¿por ejemplo el de Buenos Aires?.
O bien pensando un poco más ¿podría pedírsele al Gobierno de la Ciudad que integre al plano de catastro la plataforma de SimCity, para que de esa manera, de una forma lúdica y colaborativa podamos rediseñar la ciudad?
Dado que Buenos Aires tiene una gran diversidad en su arquitectura, sería importante que la plataforma cuente con el catálogo de edificios protegidos y que la totalidad de las construcciones que tengan un valor patrimonial estén bloqueadas para evitar su demolición virtual, pero permitiéndose el mantenimiento de su volumen quizás refuncionalizado. 
Creo que es importante asumir que no todo lo construido merece conservarse, hay muy buenas obras, y ellas son parte del acervo de la ciudad, pero así como están éstas, también hay pésimos ejemplos desde todo punto de vista, y la verdad si son demolidas, pienso que nadie debería lamentarse, además creo que le vendría muy bien a la ciudad incentivar su reemplazo por obras diseñadas con los preceptos actuales de sustentabilidad, con una estética coherente y sobre todo con una construcción de alta calidad tecnológica.
Quizás este proceso se podría implementar de manzana por vez, y de esa manera podríamos contar con una herramienta moderna y dinámica que nos permita elaborar rápidamente un nuevo código morfológico, y de esa manera incentivar y facilitar el aumento de la superficie construida, para que al igual que otras ciudades del mundo, Buenos Aires pueda sumar más habitantes.
Vía Mammoth

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